“Todo ser profundo merece una máscara” Nietzche
Existen 2 formas de muerte:
1) La verdadera muerte: la cual no se puede decir ni pensar, es la innombrable, no puede ser nombrada, llega por medio de un símbolo y es totalmente individual.
2) La muerte de la que hablamos: imaginamos, la que históricamente hemos construido de diversas maneras, con las que la enmascaramos.
La conciencia de la muerte es parte fundamental del:
Proceso de humanización (te hace humano).
Generación de las formas de vida (culturas).
Da un sentido al tiempo de vida (tomar conciencia de la vida te transforma).
La metáfora de la máscara es para que puedas mirar la muerte, son las caras que te pones para poder ver algo en donde no hay nada, ya que tu muerte no es familiar, ni es el problema: pero si la de otros.
El odio a la muerte aparece porque te ha dolido la muerte de otros, estás marcada por ella, te obliga a vivir incluso cuando no quieres. Pero aún así con todas estás contradicciones la vida aparece con toda intensidad frente a la muerte.
“A priori de la muerte es la vida,
Causa de la muerte es la vida,
Muerte consecuencia de la vida.”
A pesar de toda la fama que se le ha hecho a la muerte, ella te puede motivar a vivir la vida con sentido, con más profundidad sin perder el tiempo en cosas que no van con tu misión y lo que necesita tu alma.
Es por eso que la idea de cómo morir está determinada entonces por cómo se vivió. La pregunta que te hago es ¿Cómo has vivido tu vida hasta ahora?, ¿Has hecho de ella un obra maestra? ¿Ya tocaste la música que llevas dentro? Si no es así… ¿Qué esperas para hacerlo? El reloj sigue corriendo, te queda poco tiempo.
La meta de toda vida es la muerte, de la cual no te puedes escapar, no puedes huir de ella todo el tiempo, ya que el horror a la muerte significa que no has aprendido a vivir y has segmentado la realidad para evitar el dolor que genera la escena fundante, lo cual te lleva a generar un vacío existencial ya que no estás del todo completo, diabolizas (separas) la muerte de la existencia.
La muerte es la maestra por excelencia, es la lección que te puede llevar a llenar el vacío existencial, transformar tu perspectiva de vida, rehumanizarte, profundizar tu relación con la vida, con los otros y contigo mismo. Todo lo que rodea a la muerte te servirá de algo aunque en estos momentos no lo puedas ver ni entender.
Al entablar una relación con la muerte es tocar tu parte divina. Ser consciente de la muerte propia es dejar de ser humano y encontrarte en ese secreto diálogo en el silencio con la propia conciencia de la muerte.
Te invito a resignificar tu concepto de la muerte lo cual no es del todo sencillo…pero vale la pena, ya que si te atreves a vivir el proceso para llegar a verla como maestra: será alquímico.
Conciencia de la muerte como guía para vivir.
Conciencia de la muerte hace de nosotros una realidad diferente.
Muchas gracias por la invitación de Shindo por invitarme a escribir este artículo, por compartir esta perspectiva de la muerte que el Cedat tiene y poder juntos crear un mundo mejor.
💗."En amor y en consciencia Circe Rodríguez"🌸.